Desde la asociación Ábrego consideramos muy importante trabajar por buscar puntos de encuentro entre la ganadería extensiva y la existencia del lobo como especie protegida y elemento clave en los ecosistemas. Como especie autóctona, el lobo es un elemento integral del patrimonio natural de Europa y desempeña un rol muy importante en sus ecosistemas como la contribución al ciclo de nutrientes, regeneración vegetal y regulación de enfermedades, jugando un papel ecológico muy relevante.
Por su lado, la ganadería extensiva tiene grandes beneficios también para los ecosistemas. A través de su pastoreo se mejora la biodiversidad, se contribuye a la prevención de incendios forestales y se mantiene la cubierta vegetal, entre otras. Este tipo de manejo del ganado se enfrenta hoy en día a grandes desafíos que lo hacen peligrar como factores sociales (como el despoblamiento), económicos (bajas rentabilidades, bajo poder de maniobra de agricultores y ganaderos y total dependencia de subvenciones), y medioambientales (cambio climático, desertización, pérdida de suelo fértil, gran degradación de los ecosistemas y la biodiversidad…).
Es por eso que desde la asociación trabajamos por favorecer la coexistencia entre el lobo y la ganadería, apostando por promover y apoyar el modelo de ganadería extensiva en nuestra provincia.